Ya lo dijo Sócrates al pronunciar su famosa frase que ha perdurado durante milenios: –“Sólo sé que no sé nada”. Y resulta que ese es precisamente el principio de la sabiduría. Es muy interesante si lo relacionamos con una respuesta del Oráculo de Delfos que, a la pregunta “¿Quién es el hombre más sabio de Grecia?”, respondió:“Sócrates”.
Si a eso unimos que la inscripción grabada en la piedra de la entrada del Oráculo es “Conócete a ti mismo”, se puede decir que nos vamos situando. Precisamente cuando cada uno de nosotros individualmente llegamos a esa conclusión hemos llegado al umbral de la sabiduría. Antes de llegar a ese punto no hay nada que hacer y a partir de entonces se abren todas las posibilidades porque nos percatamos y nos maravillamos ante nuestro total desconocimiento y se abren esos otros ojos. Os dejamos a continuación un texto que ahonda en ello.
El sabio también dice: «No sé»
De acuerdo con Zarathustra, el estado más elevado de consciencia es el del niño…naces siendo un niño y luego te volverás ignorante… atravesarás muchos conocimientos, mucha memoria, y si eres lo suficientemente afortunado, un día verás que todo es falso, porque no es tuyo.
Buda puede haber sabido, Jesús puede haber sabido, Krishna puede haber sabido , pero sus conocimientos no son mi conocer, su vida no puede volverse mi vida, su amor no puede volverse mi amor. ¿Cómo pueden sus conocimientos volverse mis conocimientos? Tendré que buscar por mí mismo. Tengo que volverme un aventurero, un buscador de lo desconocido. Tengo que ir por caminos que nunca han sido hollados, por mares desconocidos, tengo que arriesgarlo todo, con la firme voluntad de que si otros han alcanzado la verdad, no hay ninguna razón para que la existencia no sea gentil conmigo.
Unas pocas personas afortunadas, empiezan a abandonar sus conocimientos prestados, y cuando empiezan a abandonar sus conocimientos prestados el círculo comienza a moverse hacia atrás, hacia su infancia. El círculo se completa cuando la ignorancia se vuelve luminosa.
Osho Sobre el libro, Asi hablaba Zarathustra de Federic Nietzsche