El desorden más perfecto del mundo

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Me gustan las palabras diferentes de significados abiertos . Que no significan nada y a la vez significan todo. Según se mire. Que se miren según las veas. Que las veas tal y como veas el mundo. Que dos más dos a veces de cinco mil, que cinco mil sean los obstáculos que has vencido hoy.

Me gusta que decidas tú cómo funciona la vida, y que decidas mal, o bien, me gusta mucho que decidas bien; pero más que eso, me gusta que decidas. Me gusta la incoherencia, sobre todo la incoherencia que entiende a razones, la incoherencia que solo entiendes tú. La incoherencia por la que te llamarán loco. No sabes cuánto cuantísimo me gusta esa incoherencia, que no tiene nada de incoherente más que el nombre.

Me encanta el desorden que sigue pautas ordenadas. Pautas exactas. El desorden a propósito. El desorden rebelde que no conoce canon alguno. El desorden al que le aburre el orden mundano. Eso es para los demás. Tú siempre has sido diferente, y no sabes cuánto me encanta. Me encanta que te camufles con colores llamativos, porque te guste llamar la atención en aquello que para el mundo pasa desapercibido. Me encanta que te guste ser así. Igual pero diferente. Diferente siempre a tu manera, que es muy distinta a la mía. Eso me encanta. Me encantan, además, las decisiones que no tienen sentido, las que nadie entiende, que jamás entren en la cabeza de un cuerdo. Que solo un loco como tú entienda. Me encantan esas decisiones, me encanta sobre todo esa locura que te incita a seguirlas. Me encantan los locos.

Me gustan las ideas, las que vienen y van, las que crecen y crecen y crecen y luego desaparecen porque llega una mejor. Me encantan las ideas, pero aún más, me encanta que tengas las tuyas propias y que no se parezcan ni en el blanco de los ojos a las mías. ¿Te he dicho ya cuanto me gustan esas?

Me apasionan los inconformistas, los que no se dejan llevar, los que se atreven a vivir coherentemente con ellos mismo, y desentonan con el mundo. Los que hablan sabiendo y saben que no saben nada. Los que siempre buscan más. Me encanta la valentía, y la falta de vergüenza. Los que le plantan cara a la vida y la cuestionan. Los que cuestionan todo. Los echados para adelante, y los que se echan para atrás para dejar pasar a una chica. Esos sí que me gustan. Son mis personas, los que son auténticos hasta las últimas consecuencias, los que no se parecen a nadie más que a ellos mismos, las ediciones limitadas, los que logran el desorden más perfecto del mundo. Los que encuentran esa incoherencia tan razonable.

Me encantaría que algún día seas tan coherentemente tú, que encuentres sentido a la vida. Me encantaría que, cuando lo encuentres, me enseñes a mí a buscarlo.

 
miki BarañanoPor Miki Barañano

 

 

 




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