Conjuntivitis de las piscinas

Llega la época estival , las piscinas están abiertas y todos estamos deseando refrescarnos con un buen chapuzón. En esta época del año podemos encontrarnos con algunas irritaciones oculares en relación con el cloro o los medios de desinfección utilizados en las piscinas, pero también debemos tener cuidado de seguir una higiene ocular básica, sobre todo si nos bañamos en piscinas naturales, lagos, en el mar….

 Lo primero a tener en cuenta es que si sois usuarios de lentes de contacto, no os debéis bañar con las lentillas puestas, en ningún tipo de agua. Como ya explicamos en otro post, los usuarios de lentillas suelen presentar microerosiones en  la superficie corneal  y el llevar las lentillas durante el baño puede favorecer que microorganismos que habitualmente son inocuos queden adheridos a la lentilla y de ahí infectar alguna microerosión y desencadenar una infección que puede resultar muy grave para nuestra visión, por lo que , por muy incómodo que sea, las lentillas no se deben llevar ni para bucear ni para nadar.

 

Con respecto al uso de gafa para nadar o bucear, si vamos a bañarnos durante un tiempo prolongado y las aguas donde estamos presentan condiciones de higiene dudosas, sería recomendable usarlas. Si por el contrario, vamos a estar en el agua un tiempo corto y las condiciones de higiene son buenas, podremos prescindir de ellas.

 

Ante cualquier enrojecimiento o molestia que notemos en los ojos después del baño o en relación con él , lo primero que debemos hacer para aliviarnos es lavar los ojos con suero salino fisiológico. Si a pesar de esta medida seguimos con irritación, o comenzamos a tener sensación de cuerpo extraño y legañas, debemos acudir al médico oftalmólogo y seguir las recomendaciones que nos indique tras la valoración de nuestros ojos. Siempre que tengamos legañas o secreciones existe la posiblidad de que tengamos una conjuntivitis infecciosa y también de que sea contagiosa, por tanto es bueno prevenir el posible contagio realizando unas medidas de higiene básicas: lavarse las manos con frecuencia, utilizar toallas y funda de almohada individuales, y evitar contacto directo, a través de besos por ejemplo, con otras personas. Toda prevención es poca cuando se trata de evitar extender una posible infección, por ello es importante seguir siempre las recomendaciones de nuestro médico  y preguntar si el proceso por el que estamos pasando es contagioso, y ante  la duda, actuar como si lo fuera.

 

Desde IOTT os deseamos que paséis un feliz verano, y cuidéis de vuestros ojos siempre, y ante cualquier problema, recordaros dónde estamos. Madrid, Barcelona y Bilbao a vuestra disposición!

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Dra Mariluz Iglesias Iglesias

Oftalmóloga especialista en cirugía refractiva y catarata en IOTT Madrid

 

 

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