La Asociación española para el Fomento de la Economía del Bien Común celebró su asamblea anual que se enfocará en aumentar su presencia en la sociedad en el futuro. Su objetivo común es el fomento y la divulgación de un nuevo modelo económico que promueve que el dinero es un medio para conseguir el bien común de la sociedad y no un fin en sí mismo.
Además se ha creado un grupo de trabajo para el desarrollo del Código Ético y el Reglamento Interno. Según el informe de tesorería, el año 2014 fue un año atípico porque fue el primer ejercicio y por tanto no hay referentes previos. Hasta ahora, las cuotas de socios ha sido solo el 23% de los ingresos, que se espera que cambie para hacer que se conviertan en el principal ingreso y garantizar en el futuro la independencia con respecto a ninguna institución u organización que no se considere dentro de los parámetros de la Economía del Bien Común.
En el reporte presentado por los miembros de la Junta, el balance hasta el momento de este movimiento es que se cuenta con 212 asociados, 2.032 simpatizantes registrados, 141 empresas con el Balance del Bien Común o en proceso de realizarlo, 4 asociaciones regionales (Cataluña, País Vasco, Canarias y Valencia) 23 Campos de Energía o grupos locales, con 75 nodos o comisiones de trabajo.
En su informe, destacó la gran labor llevada a cabo por los miembros de la junta salientes y dio la bienvenida a los nuevos. En especial a Ana Moreno, que ha sido una de las personas que más ha influido en el desarrollo de la EBC en España promocionando los primeros pasos, apoyando la creación de los primeros campos de energía en nuestro país y auditando las primeras empresas pioneras en España.
Difundir la Economía del Bien Común como un modelo viable en empresas y municipios
Los objetivos para el 2015-16 son conseguir 1000 asociados y lograr un mínimo de 200 empresas con una semilla. Además, se está trabajando en avanzar con la divulgación en universidades, institutos y colegios, para la difusión y asentamiento de la EBC en los futuros profesionales.
Internamente se está dedicando mucho esfuerzo a la gestión de la documentación, unificación de formatos y de criterios etc. En estas labores de organización se ha invertido mucho tiempo porque hay una intencionalidad muy clara en hacer un modelo diferente con una estructura muy horizontal y transversal, colaborativa y potenciadora del conocimiento colectivo. Parte de esos retos se vuelcan en una nueva plataforma tecnológica, visualizada a través de la web como portal de la EBC en español y que será, no solo un escaparate, sino una herramienta que se convierta en espacios de comunicación para los distintos perfiles y las distintas áreas.
La Asociación, que cuenta con vocalías tan poco habituales en las organizaciones como es la vocalía de “Participación democrática y transparencia” tiene la vocación de convertirse en un referente y un modelo organizativo para otras instituciones. Dentro de este marco, se aprobó un nuevo modelo de gobernanza que pretende ser inclusivo y respetuoso con todas las sensibilidades y necesidades de socios, simpatizantes, voluntarios, etc.
En el capítulo financiero, se aprobaron las cuentas del 2014 y se acordó un reparto de los ingresos para este año del 45% para el Campo de Energía local que ha generado el ingreso, 45% para la Asociación Estatal y el 10% para el movimiento internacional… lo que supone de facto el interés y la intención de crear estructuras supraestatales para el desarrollo del movimiento internacionalmente.
En esta asamblea se aprobó el relevo de Valencia como sede de la Asociación que por estatutos debe ser rotatoria cada 2 años y pasará a ser Miranda de Azán, que además es el primer municipio en España en tener su Balance Municipal de la Economía del Bien Común.
El movimiento de la Economía del Bien Común debe ser apartidista y garantizar la promoción de las empresas y organizaciones que demuestren su implicación, haciendo su Balance.
Un modelo nuevo también en la forma de reunirse
Gracias a la incorporación de la figura de un facilitador externo que gestiona los tiempos, encauza los posibles conflictos, poniendo foco sobre las propuestas y posibles soluciones y velando por que se lleven a cabo todos los objetivos de la reunión. Otra peculiaridad es que se utiliza un sistema alternativo de votaciones que se basa no en la mayoría, sino en consenso sistémico y la mínima resistencia.
Como en todas las reuniones estratégicas de la Asociación, la primera actividad ha sido tomar conciencia de uno mismo y del momento , cómo se encuentra cada asociado como individuo y cómo se sitúa con respecto al grupo.
Para saber más:
Economía del bien común (traducción al español de Gemeinwohl-Ökonomie), es un proyecto económico abierto a las empresas y promovido por el profesor austríaco Christian Felber y más de 1000 voluntarios comprometidos con la difusión y evolución de una verdadera economía sostenible y alternativa a los modelos del capitalismo y el comunismo que han quedado obsoletos.
La Economía del Bien Común se rige por una serie de principios básicos que representan valores humanos: confianza, honestidad, responsabilidad, cooperación, solidaridad, generosidad y compasión, entre otros. En la economía real actual se mide el éxito económico con valores o indicadores monetarios como el producto interior bruto y los beneficios que dejan fuera a los seres humanos y al medio en el que vivimos. Estos indicadores no nos dicen nada sobre si hay guerra, se vive en una dictadura, si sobreexplotamos el medio, si se respetan los derechos humanos, etc. De la misma manera que una empresa tenga beneficios no nos indica nada sobre las condiciones de sus trabajadores ni sobre lo que produce ni cómo lo produce.
El balance del bien común mide cómo una empresa o un municipio vive: la dignidad humana, la solidaridad, la justicia social, la sostenibilidad ecológica, la democracia con todos los agentes económicos.
Finalmente, la evaluación de esos valores podrá permitir al consumidor, en el caso de las empresas, escoger los productos y servicios que más contribuyan al bien común. Para los defensores de la economía del bien común, aquellas empresas a las que guíen esos principios y valores deben obtener ventajas legales que les permitan sobrevivir, frente a los valores del lucro y la competencia actuales.
La implantación del modelo teórico comenzó en octubre de 2010 con un grupo de empresas de varios países que participan activamente cumpliendo voluntariamente los requisitos del proyecto de economía del bien común.
Para más información: www.economia-del-bien-comun.org