Es increible la capacidad de estos niños etíopes para disfrutar de unos momentos de juego y a pesar de sus circunstancias, de no tener ningún material para hacerlo, como se las han ingeniado para materializar algo que les atrae y les gusta: una mesa de billar con la que hacer carambolas. Con tan solo su imaginación, unos palos y barro lo han conseguido. La mesa de billar es una verdadera joya digna de estar en la sala de cualquier museo de arte moderno.
Desde luego querer es poder; el ingenio y la creatividad son dos facultades humanas que están presentes y se pueden desarrollar a pesar de cualquier circunstancia. Y este es un claro ejemplo de ello, es la prueba de que una imagen vale más que mil palabras.
Esos niños son unos verdaderos arquitectos del juego y han acabado por crear una mesa de pool o billar hecha magníficamente con sus propias manos, poniendo de manifiesto que el no disponer de medios no es razón para no divertirse y crear los objetos que les gustan. En este caso nada fácil de conseguir porque no es un juguete pequeño. Toda una lección de inventiva y de magia haciendo realidad sus propios sueños.
Fuente: http://www.arqhys.com/una-tremenda-mesa-de-billar.html