El cerebro es el órgano más importante del cuerpo e indispensable para que esté sano y se pueda realizar actividades cotidianas tan sencillas como pensar, sentir emociones, hasta caminar, trabajar o hablar. Es por eso que es necesario cuidar la salud cerebral para que pueda realizar todas esas tareas tan básicas conforme pasan los años.
“Muchas personas no comienzan a pensar en la salud de su cerebro hasta que notan algunos cambios cognitivos y pérdida de memoria a los 60 o 70 años”, dice Elise Caccappolo, PhD y profesora asociada de neuropsicología en el Centro Médico de la Universidad de Columbia en Nueva York.
“Pero hay muchas cosas que puede hacer, desde la niñez, para mantener el cerebro lo más saludable posible a lo largo de su vida. Sabemos que las actividades intelectuales, la interacción social y, quizá lo más importante, la actividad física son útiles para mantener el cerebro afilado”, apunta.
– La salud cognitiva: cómo de bien piensa, aprende y recuerda.
– Función motora: cómo de bien realiza y controla los movimientos, incluido el equilibrio.
– Función emocional: cómo de bien interpreta y responde a las emociones.
– Función táctil: cómo de bien se siente y responde a las sensaciones del tacto, incluida la presión, el dolor y la temperatura. La salud cerebral normalmente suele verse dañada por la edad, lesiones, trastornos del estado de ánimo, consumo de sustancias, adicciones y enfermedades como el Alzheimer.
¿Cómo cuidar la salud del cerebro?
Para que el cerebro se conserve joven y sano conforme avanza la edad, los especialistas de Harvard sugieren una serie de métodos y hábitos para lograrlo, muchas de ellas sin la necesidad de medicamentos y de la forma más natural y sencilla posible.
Estimula tu mente
Estudios han demostrado que las actividades cerebrales, tanto en animales como en humanos, estimulan nuevas conexiones entre las células nerviosas e incluso ayudan al cerebro a generar células nuevas. De esta forma se desarrolla plasticidad neurológica y construyen reservas que proporcionan una protección contra la pérdida de células en el futuro.
Haz ejercicio
Es quizá una de las principales actividades físicas que ayudan al cerebro y a la mente. Estimula el desarrollo de nuevas células nerviosas, promueve una mejor oxigenación al cerebro, en especial a la región responsable del pensamiento. También estimula el desarrollo de nuevas células nerviosas y aumenta las conexiones entre las células cerebrales (sinapsis) que ayudan a tener un cerebro eficiente, más plástico y adaptativo.
Mejora la dieta diaria
La dieta es otro factor para que la salud cerebral esté en buenas condiciones. Según Harvard, las personas que adoptan una dieta mediterránea, que enfatiza en las frutas, verduras, pescado, bayas, aceites insaturados y fuentes vegetales de proteínas, tienen menos probabilidades de desarrollar deterioro cognitivo o demencia en un futuro.
Evita las adicciones
Ya sea consumo de tabaco o de alcohol, incluso de drogas, las adicciones de este tipo aumentan el riesgo de demencia. Los expertos sugieren evitar cualquier forma de tabaco y máximo dos copas de vino al día.
Cuida tus emociones
Las personas con ansiedad, depresión, privadas del sueño o cansadas, tienden a deteriorar su capacidad cognitiva más rápido. Los científicos sugieren priorizar el sueño y descanso y de vez en cuando obtener pruebas de función cognitiva para detectar alguna anomalía.
Construye redes sociales
Una de las formas más efectivas de cuidar la salud cerebral y evitar demencia o deterioro cognitivo es construir lazos sociales con otras personas. Convivir y platicar con un grupo amplio de amigos o familiares también está relacionado con una presión arterial más baja y una mayor esperanza de vida.
Mejora tu presión arterial
Harvard apunta que la presión arterial alta en la mediana edad aumenta el riesgo de deterioro cognitivo en la vejez. Para evitarlo, es necesario adoptar un estilo de vida más saludable para nivelar la presión. El ejercicio regular, un peso más sano y una dieta más equilibrada son la clave principal.
Controla el colesterol
Investigaciones previas han encontrado que los niveles altos de colesterol LDL (malo) están asociados con mayor riesgo de demencia. Para prevenirlo, lo ideal es hacer ejercicio, controlar el peso y evitar el tabaco. Otra alternativa para lograr el objetivo es consultar con un especialista.
Cuida tu cabeza
Otros factores que deterioran la salud cerebral y la afectan a largo plazo son las lesiones en la cabeza como los traumatismos craneoencefálicos de moderados a graves o conmociones cerebrales.
Toma aspirinas en bajas dosis
Algunas investigaciones han observado y sugieren que la aspirina en bajas dosis es capaz de reducir el riesgo de demencia, especialmente la demencia vascular causada por accidentes cerebrovasculares derivados de la obesidad o la diabetes. (Consulta con tu médico)