Se llama Alberto Davis Ortiz y el siguiente paso que quiere dar este joven en su brillante carrera es pedir una beca para estudiar en la Universidad Politécnica de Cataluña donde está el mayor centro de ingeniería biomédica del mundo así que puede que tengamos al brillante investigador en España si es que sus planes se cumplen.
Este descubrimiento hará posible detectar y ubicar un infarto cerebral en minutos, en lugar de la hora y media que se tardaba hasta ahora. A mediados del pasado mes de noviembre la prensa mejicana confirmaba la noticia: un estudiante de Ingeniería Biomédica de la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez (UACJ) con solo 23 años desarrollaba un algoritmo que salvará muchas vidas y logrará menos secuelas en los afectados por un infarto cerebral.
Alberto Davis Ortiz presentó su trabajo en el Primer Congreso Interinstitucional de Jóvenes Investigadores en Acapulco y explicó que un infarto cerebral se da “cuando a alguna parte del cerebro deja de llegar sangre. Entonces las células mueren y en cuestión de horas el área sin vida empieza a crecer”.
El estudiante explicó que “Hasta ahora sólo se podía diagnosticar el infarto cerebral con una resonancia magnética, un proceso que tarda mínimo hora y media antes de poder aplicar algún medicamento para evitar que el área muerta siga aumentando”.
Otros de los motivos para realizar esta investigación es que además “la resonancia es demasiado cara”-explicó-. Por eso desde su área de ingeniería biomédica empezó a buscar una solución que bajara costos y lo hiciera de manera más eficiente.
El sistema diseñado por Alberto Davis Ortiz consiste en el desarrollo de un algoritmo que se combina con tomografías (rayos X), que son tres veces más baratas y reduce el tiempo a sólo minutos para poder hacer un diagnóstico.
La clave del desarrollo de la investigación es el conjunto de operaciones que está hecho “con matemáticas y mucho cariño”. Dice que pasó horas frente al ordenador diseñando y probando la serie numérica hasta que automatizó el diagnóstico.
El nombre del proyecto es “Detección y Segmentación de Ictus Isquémico de Imágenes de Tomografía Computarizada”. Se hicieron pruebas con 10 casos de infarto cerebral ya comprobados y un caso real que detectó incluso el área donde estaba el daño.
Este brillante alumno es hijo de dos ingenieros agrónomos de la Escuela Superior de Agricultura Hermanos Escobar y quiere solicitar una beca para la Universidad Politécnica de Cataluña, donde está el mayor centro de ingeniería biomédica del mundo.
La investigación ya ganó el segundo lugar en el Congreso Nacional de Ingeniería Biomédica entre otros 30 participantes, y espera ser publicada en la revista de radiología clínica o en el de análisis de imágenes médicas de la editorial Elsevier.
Su trabajo lo está presentando ante académicos de todo el país, así como ante los primeros y segundos ganadores de los concursos de investigadores jóvenes que se realizaron en universidades privadas de Méjico.
Fuente: www.diario.mx